“Importancia de una adecuada ventilación post-Covid”
Nota: El siguiente texto es un texto publicado en el mes de julio en la página El Cerramiento. Para consultar el artículo original, revisar la fuente al final de esta publicación.
Es un hecho que pasamos una gran cantidad de tiempo dentro de edificios, esto se acrecentó durante el confinamiento que sufrieron la mayoría de las ciudades del mundo, y con la incorporación a las distintas actividades económicas, se mantendrá acentuada esta relación de permanencia con los espacios interiores.
En México y en muchos lugares del mundo no hemos logrado estandarizar buenas prácticas de ventilación en edificios. Es muy común encontrar que no se distingue la diferencia entre ventilación y aire acondicionado; asumiendo que cuando un espacio tiene aire acondicionado ya es un espacio ventilado. También es común encontrar diversos argumentos en contra de ingresar aire exterior al edificio, por ejemplo el incremento en el consumo de energía y la preocupación por ingresar contaminantes exteriores. Actualmente diversos edificios comerciales, incluso algunos recientemente construidos, no cuentan con una adecuada ventilación o renovación de aire.
El ingreso de aire del exterior es fundamental para tener un espacio saludable [pixbay.com]
La preocupación por la calidad de aire exterior que ingresa al edificio es fundamentada, muchas ciudades del mundo, incluyendo la Ciudad de México, sufren de contingencias ambientales que llevan a limitar frecuentemente el contacto con el aire exterior. Sin embargo, no se presta la adecuada atención a la contaminación que se genera dentro del espacio interior. Cuando el aire no se renueva con el aire exterior en un espacio, las concentraciones de dióxido de carbono se incrementan, lo cual afecta el nivel de confort y la capacidad de concentración de los ocupantes. Existen otros contaminantes que pueden estar presentes en el interior de un espacio (compuestos orgánicos volátiles, formaldehídos, etc.), y una de las formas más efectivas de limitar su impacto en la salud de los ocupantes es reducir la concentración de estas sustancias con el ingreso de aire exterior.
Un edificio mal ventilado es un edificio enfermo que afecta la calidad de vida de todos los ocupantes [build.com.au]
Sin embargo, una mala ventilación no solo contribuye a la acentuación de contaminantes interiores, sino también puede incrementar el riesgo de contagios de enfermedades, como la que actualmente el mundo está padeciendo. Si el aire no se renueva debidamente en un espacio interior, las partículas suspendidas expedidas por algún ocupante contagiado se distribuirán más fácilmente dentro de los espacios, afectando a otros ocupantes del edificio. Los contaminantes exteriores no deben ser un obstáculo para la renovación de aire: existen distintas estrategias de control y filtrado que permiten ingresar aire exterior en buenas condiciones, con contaminantes reducidos y con un consumo de energía optimizado.
Si el aire solo se re-circula en un espacio sin extraerlo o ingresar aire nuevo, las partículas expulsadas por los ocupantes se quedan en el mismo o solo se trasladan a otros espacios del edificio [Mason&Barry]
Entre todas las medidas de sanidad e higiene que se están implementando en el regreso a los espacios de trabajo, se debe considerar una revisión exhaustiva del sistema de HVAC, para asegurar que éste contribuye a un espacio de trabajo sano y saludable. Existen varios puntos de atención (nivel de filtrado, control de humedad relativa, temperatura, presurización, propiedades microbicidas, etc.), empero, es fundamental ingresar aire exterior en óptimas condiciones.
Filtros de aire son esenciales tanto para reducir los contaminantes exteriores como para capturar las partículas que pudieran transportar microorganismos, la instalación de filtros debe cuidar que este cubra completamente la sección del paso del aire [Foto: Servydine]
La necesidad de crear espacios más saludables en el entorno construido debe incluir la incorporación de buenas prácticas de ventilación en los edificios: un edificio adecuadamente ventilado es un importante paso hacia un edificio más saludable, más productivo y, en algunos casos, con una menor huella de carbono.
Las certificaciones LEED y WELL Building, que ya se aplican en México, refieren a normatividades y estándares de clase mundial en temas relativos a la Calidad del Aire en Interiores, demostrando la efectividad y rentabilidad que suponen la salud y la productividad en edificios sustentables.
Alejandro Baeza, MSc LEED AP
abaeza@bioconstruccion.com.mx
Coordinador Servicios Commissioning
Bioconstrucción y Energía Alternativa